Isaac Hernández, el mexicano que triunfa como bailarín profesional en el mundo.

Hernández bailó por primera vez en el American Ballet Theatre II. En 2008, se unió al cuerpo de ballet de San Francisco Ballet, fue ascendido a solista en 2010. Se unió al Ballet Nacional Holandés como solista en 2012 y fue ascendido a bailarín principal al año siguiente, después de interpretar el papel del Príncipe Désiré en The Bella Durmiente.

Después de hacer una aparición especial en El lago de los cisnes con el English National Ballet, se unió a la compañía como bailarín principal en 2015. Su repertorio también incluye obras clásicas como Romeo y Julieta y La Sylphide, así como obras contemporáneas como Fantastic de Aszure Barton. Seres y Giselle de Akram Khan. 

Como artista invitado ha aparecido en el Ballet de la Ópera de París como Solor en La Bayadère y en Don Quijote de Nureyev, y en la Ópera de Roma en Baryshnikov y la versión de Don Quijote de Laurent Hilare.

En 2015, fue llamado "el chico de ballet más atractivo en llegar a Londres desde Carlos Acosta". 

En 2018, Hernández ganó el Prix Benois de la Danse, por su actuación en Don Quijote con el Ballet de la Ópera de Roma y La Sylphide con ENB. Es el primer bailarín mexicano en ganar el premio. 

Es un embajador de las artes y el turismo de México y fue el artista más joven en recibir un premio de artista destacado del presidente mexicano. Hernández y su hermano, Esteban, establecieron un proyecto en su ciudad natal de Guadalajara, México, para traer bailarines de clase mundial a México para actuar, enseñar en talleres e inspirar a jóvenes bailarines allí. Pero la financiación del gobierno para el proyecto ha enfrentado obstáculos.

Hernández tuvo su debut como actor en la película King of the World de Carlos Saura. Luego actuó en la próxima serie limitada de Manolo Caro para Netflix Someone Has To Die en el papel de Lázaro, un bailarín de ballet. La serie se estrenará en 2020. 

En 2018 Isaac Hernández, a los 28 años, se convirtió en el primer bailarín mexicano en ganar un Premio Benois. Dicho premio es el máximo honor que un bailarín de ballet puede recibir, algo así como el Oscar de la danza. Además, está reconocido como una de las 1000 personalidades más influyentes en Londres.

En 2011, Isaac visitó México para presentarse en el más importante escenario de su país natal, el Palacio de Bellas Artes. Sobre ello comentó:

“Era mi regreso a México. En aquel entonces trabajaba para el San Francisco Ballet, así que traje un grupo de compañeros. Fue una gala muy especial para mí, presentarme ante un público conocedor. Me dieron una bienvenida muy especial, pero descubrí la necesidad que había de crear nuevos públicos en México.”

Gracias a ello, Hernández fundó el recital anual Despertares, evento para el cual creó un cartel curado con fotografías de distintos bailarines con los que ha trabajado. En dicha obra, Isaac Hernández integró nuevos géneros musicales a los tradicionales. La obra terminó por convertirse en el espectáculo de ballet más grande de México y de todo el mundo.

“En tan solo cinco años desde su concepción, Despertares se ha convertido en la gala de danza más grande del mundo. […] Este espectáculo ha conseguido lo que muchas compañías llevan años intentando: romper con el estigma elitista asociado al ballet y formar una nueva generación de fans para la danza”. 

Isaac Hernández es todo un orgullo dentro del escenario artístico de México, no solo por su talento y su habilidad como bailarín, sino porque a pesar de haber partido al extranjero nunca olvidó su país, y encontró maneras para apoyar a los artistas y bailarines locales, un gran compromiso y lealtad hacia sus orígenes. Un mexicano más que pone en alto el nombre de su país.