Cuatro pilotos mexicanos que hicieron historia en el mundo.

Memo Rojas

Hay algunos apellidos que en México son sinónimo de automovilismo. Rodríguez es uno de ellos; y Rojas, definitivamente, otro.
En lugar de sangre, Guillermo “Memo” Rojas Jr. bien podría tener aceite corriendo por sus venas. Este piloto mexicano es hijo de una leyenda del automovilismo —Guillermo Rojas Sr. — y es un heredero que no solo mantuvo la dinastía, sino que elevó aún más su grandeza.

Desde pequeño, Memo Rojas demostró de qué estaba hecho. Como todos los pilotos, siendo aún un niño de 12 años comenzó su carrera en kartings. Debutó en 1993 y dos años más tarde, consiguió ser campeón nacional en la categoría.

Luego, tras un breve paso por la Fórmula 2, desembarcó en la Fórmula 3 Mexicana, una categoría hoy desaparecida pero que, en su momento, hizo vibrar a los fans mexicanos.
Allí no pudo ser campeón, y tuvo que contentarse con los subcampeonatos en 1997 y 1998.
Aún más, su paso por esta categoría de monoplazas casi le cuesta la vida. En la Fórmula 3 Mexicana, Memo Rojas tuvo un fuerte accidente que lo obligó a hacer una pausa en su carrera profesional.
Para su próximo título debió esperar a 2003, cuando fue subcampeón en la Barber Dodge Pro Series, una categoría con la que pudo correr en México, Estados Unidos y Canadá.

En 2007, su carrera dio un verdadero salto al firmar con Telmex-Ganassi Racing, el mejor equipo de la Grand American Road Racing Association (Grand-Am), una empresa que organizaba distintas carreras de prototipos en las rutas de Norteamérica.

Allí, el piloto mexicano Memo Rojas corrió junto a una leyenda del automovilismo, Scott Pruett, y no paró de cosechar títulos: subcampeonatos en 2009 y 2013, y campeonatos en el resto de los años (2008, 2010, 2011 y 2012).

De esos años, se destacan algunas victorias en las carreras más famosas de resistencia: tres en las 24 Horas de Daytona (2008, 2011 y 2013); otras tres en las 6 Horas de Watkins Glen (2008, 2009 y 2010); y una última en las 12 Horas de Sebring (2014).
Luego, en 2017, Memo Rojas sumó un nuevo campeonato a su currículum al conseguir coronarse en la European Le Mans Series.

Sergio “Checo” Pérez
 

El automovilismo mexicano le debe mucho a Sergio “Checo” Pérez.
En 2011, el guadalajarense debutó en la Fórmula Uno, cuando se habían cumplido ya treinta años desde que corriera en el Gran Circo el último piloto mexicano, Héctor Alonso Rebaque.

Nacido en 1990, Checo Pérez comenzó su carrera a los seis años en karts. Allí batió algunos récords relativos a su corta edad: Fue el piloto más joven en participar en la Categoría Juvenil (1997) y en ganar ese campeonato (1998).

En 1999, siguió sorprendiendo por su destreza precoz. De hecho, para competir en la serie Shifter 80 cc tuvo que obtener un permiso especial de la Federación Mexicana de Automovilismo. ¿Cómo resultó? Fue el piloto más joven en ganar una competencia de esa categoría.

Tras varias victorias y participaciones destacadas, y en especial tras ver a su hermano Antonio en la Fórmula Ford de Inglaterra, Checo Pérez decidió comenzar su carrera profesional en 2004.

Desde el inicio, apuntó a tener proyección internacional. Por supuesto, no fue fácil.
En 2005 y con apenas 14 años, él debió partir a Alemania para competir en la Fórmula BMW, un campeonato que reclutaba jóvenes talentos y servía de puente entre los kartings y la máxima categoría.

Checho Pérez ya tenía un objetivo claro: correr en la Fórmula Uno.
Mientras tanto, el piloto mexicano conoció el éxito en Europa. En la Fórmula 3 Británica salió campeón en 2007, estableciendo un récord de puntos y siendo el piloto más joven en lograrlo, con solo 17 años.
Luego, tras una exitosa campaña en GP2, en 2011 Checo Pérez cumplió su sueño de llegar la Fórmula Uno, como piloto del equipo Sauber.
 

De esa manera se convirtió en el quinto mexicano en competir en la Fórmula Uno, y el primero desde que lo hiciera Héctor Rebaque entre 1977 y 1981.
Su sello característico en la categoría es la gestión de los neumáticos, algo que le valió la consideración de los especialistas.
En 2013, pasó a McLaren, para sustituir a Lewis Hamilton. Pero el equipo inglés no respondió a sus expectativas y al año siguiente pasó a Force India.

En 2016 y 2017 colaboró a que Force India quedase cuarto en el Campeonato de Constructores —detrás de Mercedes, Ferrari y Red Bull—, cerrando así las mejores campañas en la historia de esta escudería.

En 2019, tras pasar momentos complicados, Force India se convirtió en Racing Point. Los comienzos nunca son fáciles, pero en el segundo tramo del campeonato el equipo logró recuperarse y el piloto mexicano Checo Pérez quedó en el décimo lugar del Campeonato, con 52 puntos.

Como sabemos, 2020 trajo complicaciones para todos los equipos y pilotos. Checo Pérez vive su décimo año en la máxima categoría.
 

Benito Guerra Jr.
 

La estrella mexicana del Rally, inicio su carrera a muy temprana edad, a los 9 años comenzó su camino en los motorsports compitiendo en competencias automovilistas y de motociclismo.
Desde los 12 años, acompañaría a su padre, como copiloto, en distintas competencia automovilísticas como la carrera panamericana .
Fue en 2008 cuando inicio su participación en el Campeonato Mexicano de Rally, en el cual salió campeón en 2006 y 2007.
En 2011 las victorias de Benito Guerra no solo eran en el territorio Mexicano, ya que se coronaba como el ganador del Campeonato de España de Rally de Tierra.

Al año siguiente, Guerra Jr, conseguiría el primer lugar en el Campeonato Mundial de PWRC (WRC 2), convirtiéndose en el primer piloto de rally mexicano en obtener un campeonato mundial y el segundo piloto mexicano, después de Pedro Rodríguez, en obtener un título mundial avalado por la FIA.

Ese mismo año correría en la ROC junto a Ryan Hunter-Reay, obteniendo 2 victorias y una derrota. Fue en 2019, cuando Guerra Jr conseguiría la victoria absoluta de la competencia derrotando a pilotos como Sebastian Vettel, Pierre Gasly, Daniel Suárez y Esteban Gutiérrez.
 

Patricio O’Ward
 

Se trata de uno de los talentos más jóvenes del automovilismo mexicano. De alguna manera, a una generación de pilotos mexicanos que nació para saltar las fronteras de su país y tener proyección internacional.
Patricio O’Ward Junco, también conocido como Pato O’Ward, nació en Monterrey en mayo de 1999. Por esos días, “Livin’ la vida loca” de Ricky Martin lideraba el Hot100 de Billboard y Bob Esponja estrenaba su serie en Nickelodeon.
En 2005, Pato O’Ward comenzó su carrera deportiva en karting, categoría en la que estuvo hasta el 2012, y que le valió varios campeonatos tanto en México como los EE. UU.
Luego, comenzó su fama internacional. Se destacó por obtener buenos puestos en los campeonatos a pesar de perderse varias carreras.
En la Fórmula 2000 Pacífico ganó cuatro de cinco carreras en las que participó, para quedar quinto en el campeonato. En el Campeonato de Francia de F4 se perdió las primeras dos fechas y quedó séptimo de la temporada.
En 2016 comenzó su segundo año en el Campeonato Pro Mazda y ganó seis de las primeras siete carreras. Pero luego no pudo mantener esos buenos resultados y quedó subcampeón.

Al año siguiente, corrió en la clase Prototipos Challenge de la WeatherTech SportsCar Championship. Junto a su compañero James French, salió campeón y ganó en dos carreras muy importantes: las 24 Horas de Daytona y las 12 Horas de Sebring.
De esa manera, Pato O’Ward fue el piloto más joven en ganar ambas carreras con 17 años de edad.
2018 lo encontró campeón en Indy Lights Series, la categoría de monoplazas más importante de los EE. UU., con nueve victorias y tres segundos lugares.
Luego, en mayo de 2019 O’Ward se pasó al Equipo Júnior de Red Bull.

“Naturalmente, cada piloto de carreras tiene su ojo puesto en la Fórmula Uno”, dijo O’Ward al firmar con Red Bull. Ojalá algún día tenga la oportunidad.

Mientras tanto, ahora sigue en Indy Car con Arrow McLaren SP, donde renovó contrato hasta el fin de la temporada 2021.